Pero la primera señal de la tormenta no es un trueno, es la puerta. Una mujer violenta, un disparo, un asesinato.. provocan una onda expansiva y cuanto más cerca estas más te sacude.
Cuando amas a alguien te expones al sufrimiento, esa es la verdad. Quizás esa persona te parta el corazón o quizás tú se lo partas a ella y no puedas volver a verte de la misma forma, esos son los riesgos.
Ves a dos personas que van de la mano y crees que son tal para cual, pero realmente no pasa nada. La idea de perder tanto control sobre la felicidad personal es insoportable... esa es la carga, al igual que las alas tienen un peso, un peso que notamos sobre la espalda pero es una carga que nos levanta, que nos permite volar....
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