Confrontación.

Desde que nacemos nos enseñan a luchar por nuestros sueños, por seguir aquello que nos proporciona la felicidad. Eso que nos da el aire para respirar cuando nos vemos ahogados por el día a día. Catarsis pura.
Pero también nos dicen que debemos doblegarnos al deber moral para labrarnos un futuro y cuando esos dos conceptos, el placer y el deber, chocan es cuando realmente surge el problema. Nadie dice que el segundo no sea de nuestro agrado, al fin y al cabo es un camino que escogimos nosotros, pero no lo es todo. En lo personal, no puedo dedicarme sólo a cumplir un sueño que me de un futuro. No puedo tener una única aspiración en esta vida, por que en el tiempo que llevo jugando mi partida he conocido otras cosas que me satisfacen más, mucho más. Pero sé que ya es tarde para hacer de ello un futuro y que no es más que eso, un "hobbie".  
"La edad para aprender a hacerlo es desde pequeños, pero aún no es tarde para ti. Puede que no llegues algún día tan lejos cómo los grandes pero al menos cuando te veas ahogada por el día a día de verdad y sólo tengas un instante para disfrutar el momento verás que te da el oxígeno para seguir soportando la condena. Cuando veas que no tienes el tiempo que deseas dedicarle sino que sólo puedes disfrutarlo cuando la ocasión te lo permite verás que ahí si que es realmente tarde. El límite de tu alcance lo pones ahora. Para remediar el error no es tarde, puedes hacerlo mañana, en una semana. Pero decídete de una vez y deja de perder las cosas que no tienes. Y si decides dejarlo del todo espero que no llegue un día en que te des cuenta de que eres una más del montón que vive la rutina y deja la vida pasar" Cada segundo que pasa es una oportunidad para cambiar las cosas.
Ojalá pudiera expresarme mejor. Sí tan sólo vierais las cosas como yo lo hago... 
"El que mucho abarca poco aprieta" Ese refrán sin duda lo invento alguien que se dio cuenta demasiado tarde de que no había luchado con todas sus fuerzas pero por hacerse el duro intentó pisotear y demoralizar a los demás con semejante redundancia. 
La vida tiene muchas opciones, no tienes que escoger siempre la que te parece mejor, sino la que te hace más feliz. 
Sí la gente dejara de pensar por un instante en lo que debe hacer y se preocupara por lo que desea hacer sin que perjudique a nadie, sería todo muchísimo más llevadero.
Quizás no llegue hacerme entender, pero no dije que fuera a tirar la toalla en ningún momento tan sólo que aunque si que sea mi aspiración no va a ser mi prioridad en la vida, pero sí lo más importante ahora. No me va a dar la felicidad, sólo de comer, si acaso. 
¡Sí, lo admito! Soy una inmadura que no sabe lo que quiere. ¿Pero es que acaso nuestro sueño en la vida ha de ser lo que esperamos llegar a hacer en un futuro para ganarnos el pan? Cuando nos preguntan de niños que es lo que queremos ser de mayor, hacen la pregunta como si fuera "Qué es el sueño de tu vida el cual deseas cumplir" y dan por sentado que nuestra meta es esa, que la respuesta es a lo que queremos dedicarnos y no queremos hacer nada más.
Sólo una cosa, no me exijáis entonces nada más, porque a la mínima que me libre del deber voy a gastar mi tiempo en el placer y no en complaceros ni atenderos. (aunque he de admitir que el río siempre vuelve al mar y que en el fondo confieso nunca fui muy fiel a cumplir promesas que no sentía) 
Pienso ampliar mis límites y mis horizontes, expandir los brazos para coger todo lo que pueda mientras el cuerpo resista. No pienso ser una oveja más en el rebaño.

Lamento deciros que no pienso rendiros cuanta a ninguno. Me resulta indiferente si estáis de acuerdo con mi manera de hacer las cosas o si siquiera os parece lo adecuado. Cada uno tiene derecho a gobernar sobre sí mismo y la jurisdicción, por fortuna, no pasa de ahí. 

No tengo nada más que discutir. Allá vosotros con vuestro camino.

Porque todos llevamos nuestros propios demonios dentro.

He aquí la redención, donde concluye el desasosiego en lo catártico de una lágrima.

Incompleto.

He intentado expresarme repetidas veces sin lograrlo.
Puede que mi lenguaje no deba de ser aquel que es escrito con símbolos, quizás deba de hacerlo con un vehículo capaz de conmover vuestras almas, que os llegue a ese recoveco en vuestro interior que explota en un millón de emociones incontrolables, incapaz de ser justificado de una manera racional.

¿Por qué la música es capaz de ponernos la piel de gallina, de hacernos llorar o reír? ¿Dónde está la conexión entre lo emocional y lo físico? ¿Qué tiene el oído capaz de hacer esa transformación?
Quiero ser capaz de hacer eso, de crear esos acordes y melodias que os hagan sentir esa pasión emocional que llene vuestro vacío. Pero la mitad de vosotros aunque comprenda lo que escribo no entenderá lo que pienso, y la otra mitad ni se molestará en leer esto.

"Incompleta". Así es como muchos nos sentimos en una etapa de nuestra vida, y puede que tengamos la respuesta a esa desolación delante de nuestros ojos pero no sabemos verlo. Mucha gente busca mitigar ese dolor con una media naranja que libere ese peso de sus corazones, pero lo que no saben es que eso lo podemos lograr únicamente solos a pesar de que siempre nos hicieron creer lo contrario, pero realmente nadie merece cargar con esa responsabilidad. Todos tenemos nuestros propios fantasmas dentro, nuestras propias batallas que luchar. No importa a donde huyas, cuantas personas entren en tu vida y dejen su firma en ella... SIEMPRE tropezarás contigo mismo.

Puede que sólo escriba cuando estoy mal y por eso no sea del todo parcial y objetiva, cuando estoy  en un estado anímico capaz de sacar lo peor de mí a flote, cuando me siento perdida y sólo soy capaz de encontrarme en mi tinta, pero no veo nada de malo en ello. Es una emoción más que me enseña... que me muestra lo que es realmente estar vivo, y es que sólo se puede escribir desde la angustia, porque cuando se es feliz, cuando se vive en una pasión compartida, no se escribe, sencillamente se vive.
Sólo puedo hacer una cosa: luchar. Luchar para lograr llenar mi propio vacío, de conmoverme a mi misma ya que al fin y al cabo sí hago música es para mí, no para alegrar vuestros oídos. Y mantendré este ritmo en el silencio esperando a que otra nota suspendida en el aire encaje perfectamente para crear la sinfonía de mi vida, única y sin acabar. 

Esto no es para vosotros, es para mí.

Puede que me repita muchas veces con el mismo tema, pero cada vez soy más consciente del mundo que hay a mi alrededor que me devorará si no lo aprendo a conquistar.

Estos días me estoy parando a pensar en todo lo que ha pasado en mi vida, los errores que he cometido y que me han ayudado a ir madurando aunque no se note la diferencia con la niña de antes, las cosas que deje pasar y ahora me arrepiento de no haber hecho, los caminos que estoy escogiendo para recorrer en el futuro y los cambios tan vertiginosos que se aproximan con ello...

He aprendido que no todo lo que reluce es oro, que la gente tiene tantas caras como estados de ánimos, que lo que para mi puede parecer perfecto para otro es una máscara de falsedad e hipocresía y que estamos en un sitio "donde todo el mundo sabe todo y nadie tiene idea de nada" y que la gente tiene un ingenio tan afilado que podrían cortarse la lengua con él. Me han pasado últimamente cosas con las cuáles no me he sentido muy cómoda ni muy feliz. Pero este tiempo me ha hecho reflexionar para ver quien merece la pena realmente. No me importa los errores que haya cometido la gente, a estas edades esos fallos son los típicos del mundo y el daño del pasado para el pasado queda, no hay más que hablar de el tema. El verdadero gran fallo está en que dejamos pasar nuestra existencia cómo si fuéramos a vivir para siempre o cómo si no importara gran cosa lo que tenemos. Sólo tengo una vida, y no voy a malgastar el tiempo que tengo para disfrutarla odiando a gente, llorando por cosas que me faltan y amargándome por aquello que no valga la pena (por más que esto se está convirtiendo en uno de los nuevos dogmas de mi vida me cuesta ser fiel a esas palabras). En esta vida hay demasiadas lecciones que no vale la pena ni molestarse en aprender.

Ya se que los cuentos de hadas no existen. A medida que me acerco a una felicidad relativa me doy cuenta que estoy bailando sobre un castillo de naipes... pero aún no quiero abrir los ojos, no quiero parar de danzar... Porque si veo que puedo caer me precipitaré al vacío sin nada que me frene.

Caminos

 En esta vida hay momentos en los que te toca pensar por y para ti, sin tener como prioridad los deseos de los demás, aprendiendo a ser un poco más egoísta. Podemos fallar o acertar; llegar alto o caer muy hondo; estar conformes o no estar de acuerdo con el resultado. Esos momentos en los que toca madurar, pensando con muchísimo cuidado cada paso del camino que vamos a escoger... esos pueden que sean los momentos más complejos de nuestras vidas porque lo hacemos en busca de nuestra propia felicidad.
  Porque cada movimiento que hagamos sobre el tablero hará que las cosas cambien de un modo irreversible, rechazando todas las posibles alternativas. 
 Una vez que empieza la partida, ya no hay vuelta atrás. 

Seguir siempre adelante

Todo está hecho. Terminado. Das unos cuántos respiros.


Aquellas personas que te apoyaron en tu camino, que te dieron fuerzas... algunas ya no están, otras se han mantenido ahí, muchas nuevas han llegado. Miras a tu alrededor y allí están los que siempre, siempre fueron gente de gran valor. Luego te das la vuelta y miras hacía atrás, haces un recuento de los errores cometidos, de esos fallos que te hicieron perder más de lo que podías apostar, que te hicieron caer, y es que si quieres conservar lo que fuiste, tendrás que asumir las veces que fallaste. También triunfaste. Triunfador no es sólo el que vence a los demás, sino el que se conquista a sí mismo, superando sus límites. El triunfo más valorado, el reto más difícil. Hay ciclos que se cierran y debes desechar de tu vida todo lo que consideres que ya no es de utilidad para así hacer hueco a lo que venga.
No estaría mal desaparecer por unos momentos antes de volver a la batalla.

Quién sabe que vendrá ahora, el caso es que estamos preparados para afrontar lo que sea que nos espere.
Seize the day or die regretting the time you lost

!

Algo de asco me tiene que dar esta vida; ¿es que de verdad la vida es tan dura?, ¿de verdad existen tantas complicaciones para una sola cosa? solo hay una vida, dios, ¡tan solo quiero disfrutarla!

Pierde sentido si se lo encuentras...

Cuantas veces no me habré preguntado si nuestra vida tiene sentido, vivir, respirar, comer, dormir, caminar, hacer las cosas del día a día... siempre igual, vivimos para hacer progresar a la sociedad. 
La vida es así, hacer lo mismo cada día y avanzar de a pocos. Pero creo que el sentido de la vida está en buscar eso que lo hace diferente a la rutina, al día a día, hay que buscar esos instantes, los momentos, las acciones que hacen de nuestra historia un misterio, un juego donde el premio es la felicidad.
Por nuestra vida pasan muchas personas, cada una muy diferente de las otras y que influyen de maneras muy distintas, van ocurriendo acontecimientos muy variados, a veces no nos damos cuenta y dejamos pasar esas  esas personas, esos hechos y esas oportunidades que podrían haber sido el camino para encontrar lo que tanto anhelamos, a veces lo dejamos escapar con una simplemente despedida y sin un "nos vemos pronto".

Tenemos que darnos cuenta antes, saber reaccionar con antelación, saber decidir si una persona nos conviene o no, aunque no sepamos lo que ocurrirá al final, sin dejarlo de lado por el miedo a equivocarnos. Dejar los temores.

Porque la vida no puede ser tan monótona, sin locuras, sin emociones, sin riesgos, sin risas, sin errores… Es algo simple pero sin color y que pierde sentido si se lo encuentras.

Despedidas

Esa canción que tocó cada parte de tu ser. La suave luz de un domingo por la mañana que se filtraba entre las cortinas. Las fiestas, los bailes, las películas que nos hicieron llorar y reí, las ilusiones, las frustraciones, la desesperación, el miedo. Todo lo que te compone por dentro un día acaba. Es una parte de ti que simplemente, en un único instante, se va.

♥

Si tuviésemos que describir la vida con algo material podríamos hacerlo alguna vez como si se tratase de un semáforo, un camino por el que siempre tendremos que pasar y que siempre va a cambiar de color.

Algunas veces estará en verde, de libre paso, podremos ser felices si queremos serlo en ese instante, tendremos la oportunidad de obtener muchas cosas que queremos y necesitamos, podremos avanzar sin mirar hacia atrás. Sin embargo sabemos que no siempre estará en verde por lo que debemos aprovechar esa oportunidad.

Otras veces, más frecuentes y cotidianas, el semáforo estará en naranja intermitente, precaución...
A medio camino entre el rojo y el verde, tendremos que actuar con cuidado, hay quienes se arriesgan y consiguen continuar y quienes se llevan un golpe y sufren durante un tiempo, aquí la decisión será decisiva y tendremos que advertir bien las señales, mirar a lo lejos, a ambos lados... Sólo nosotros sabremos las fuerzas que tendremos de llegar al otro lado... o de no llegar.
Finalmente el rojo, prohibido y/o/u peligro.  puede que nos obligue a ser pacientes, aunque haya quienes vean camino suficiente como para arriesgarse, muchas veces es mejor no hacerlo. El rojo al igual que el resto, será temporal y el tiempo que dure será relativo cuanta más prisa tengamos más lento parecerá que pasa... y cuanta menos prisa viceversa...
A menudo nos daremos cuenta de que justo llegamos cuando va a cambiar de color o que ocurre algo que nos obliga a tomar una elección, continuar o esperar al próximo turno, cuando cambie a verde de nuevo. A veces veremos que cuando arriesgamos es justo en el momento en el que pasa a verde. No corras contra el viento, vive el momento y aprovecha cada color al máximo, aprende todo lo que puedas con ellos, eso es lo que te hará mas fuerte para los siguientes semáforos.

Cuando lo que parecía sencillo se vuelve complicado.

Al principio siempre intentas pensar razonadamente, siendo lógico y objetivo,manteniendo la mente fría  y con todo bajo control. Así parece fácil pero cuando llegas a ese punto en el cual solo quieres dejarte llevar, estás perdido. Cuando ya no razonas y te guías por emociones. Cuando no piensas y solo te apetece sentirle. Ahí no hay escapatoria posible.

Aleatorio

En el fondo, si te pones a pensarlo de verdad, siendo objetivo y mirándolo todo con un poco de perspectiva te das cuenta de que se puede resumir con un pensamiento, uno profundo "¿para qué preocuparse?". El único motivo por el que vivimos es para buscar la felicidad, vivimos para amar y amamos para vivir felices. Ella no tenía la felicidad... al menos no aún pero todavía lo amaba y eso nunca cambiaría. Él era su "¿para qué preocuparse?" así como ella era lo mismo para él.


En toda relación hay siempre vacios dolorosos y es ahí donde los deseos imposibles entran en juego.

Música

Sé que ya he escrito antes de esto pero hoy, esta noche y en este momento volví a sentir algo que hacía realmente mucho tiempo que no sentía, que echaba en falta y que sin lugar a dudas es algo que forma parte de mi vida cuando estoy bien. 
Es esa emoción, esa sensación que te recorre el cuerpo como una corriente eléctrica, desde la columna expandiéndose por todo tu cuerpo hasta llegar a tus brazos y piernas, poniéndote los pelos de punta y la piel de gallina, haciendo que broten de tus ojos lágrimas de emoción y produciéndote unas ganas de llorar al sentirlo indescriptibles. Y todo esto es producido por la música, por aquella que te llega tan hondo que te hace sentirte realmente vivo, que te toca el alma y danza en tu interior llenándote y a la vez vaciándote de todo pensamiento y toda preocupación, aquella que te hace despertar de un golpe. 
No sé si os pasará lo mismo que a mí, pero yo pierdo toda razón de ser cuando me ocurre esto. Y cuando acabo de escuchar esa canción, esas melodías, esa sucesión de notas más agudas o más graves... vuelvo a tener ese impulso en la mente que me lleva a querer vivir esto, a plantearme todas mis metas por vivir la música así, para poder ser libre y feliz, para poder llegar a ser YO quien logre emocionar a alguien del mismo modo en que lo hago yo.

 Es ella quien ha logrado despertarme esta vez, con su juventud y su impactante voz, con su gracia natural y la facilidad con que lo hace, con su modo de vivirlo aunque pueda equivocarse. Con esas dos simples canciones que me dejan sin palabras... Porque son estas cosas las que hacen que el mundo no de tanto asco. 

Hasta que el fuego deje de arder

Serénate, ten confianza en mí...
hasta que el sol rechace, no te rechazaré yo,
hasta que las aguas se nieguen a brillar para ti
y las hojas a murmurarte, no se negarán mis palabras a brillar para ti y susurrarte

Presente

Recuerdo cuando era pequeña que me preguntaron alguna vez si era una niña perfecta y yo no supe que decir. Esta noche me doy cuenta de que he crecido lo suficiente para responder a esa pregunta. 
En toda mi vida he sido muchas cosas, he sido una niña adorable y buena, una traviesa, una llorona, una caprichosa, un chicarrón, un monstruo destructor, una sensible y romántica, una pasota, una sociópata, una melancólica, una borde, un cielo y un diablo, un remanso de paz y una tormenta caotica, incluso un agujero negro. También he sido inteligente, valiente y cobarde, una idiota, una irresponsable, imprudente, he sido consecuente y rebelde, muchas veces fui y soy tímida, otras tantas trato de ser una fiera, algunas llego a ser enternecedora. Siempre he sido terca, unas tantas implacable, un hueso duro de roer, un pez que se deja llevar por la corriente, alguien con ideas propias, una cenicienta sin zapatos de cristal, una soñadora, tonta, una chica sencilla en ocasiones y muchas veces complicada, atrevida, una lunática en demasiados momentos y una tardona que siempre se hace esperar, también inocente y alguna vez perspicaz. He llegado a ser alguien que no vivía en otro sitio que en las nubes y que actuaba sin pensar, otras veces he estado al filo del precipicio y con los pies bien anclados en el suelo, hasta mi vida a sido un vacío en el que no dejaba de caer, he sido también un libro abierto en el que la gente contaba su historia y se iba y también un cajón vacío, cerrado y hermético. He sido grande y muy muy pequeñita. He sido alguien que ha corrido con el viento en contra y también a favor.

En cada etapa de mi vida he demostrado ser una persona diferente. Algunos días peor y otros mejor. Me he metamorfoseado demasiadas veces algunas veces de mayor agrado que otras, de eso no cabe la menor duda pero nunca jamás he sido perfecta. Solo intenté ser dueña de mi propia vida en cada momento, buscaba lograr que nadie pudiese decirme como vivir, arriesgándome yo misma a cada paso que daba, buscándome con diferentes formas de ser y soñando que volaba muy muy alto, que nadie podía hacerme bajar. Mostrándome sin miedo. Sigo intentando lo mismo porque voy a luchar por lo que quiero hasta conseguirlo, lograré lo fácil, lo difícil y lo improbable, y hasta lo imposible, sin olvidar los buenos recuerdos, por mucho que me pueda doler recordarlos pero mirando hacia el pasado y viendo las cosas buenas como etapas en la vida que me hicieron feliz, demostrando al mundo que ya está bien de tanta tristeza y de inseguridad, que toca sonreír con lo poco que nos de la vida sin pararnos ni caernos, y si caemos que el daño cure rápido, sin preocupaciones, sumando y siguiendo siempre. Haciendo de mis errores parte de mis mejores historias.

El Juego

Llevo un tiempo ausente, he de reconocerlo, pero también he de admitir que he estado pendiente de otras cosas, cosas que no me hacen bien, pero tampoco me hacen mal... Últimamente dedico la mayor parte de mi tiempo a buscarme a mi misma y a pensar, pensar que hago con mi vida y a que me he dedicado la mayor parte de ella, pensar que hacer en un futuro... Pero sobretodo, que soy yo como persona.

Siempre pensé que sabía lo que quería, que tenía todas las cosas claras, que conocía mis limites, hasta donde podía llegar, los objetivos que me marcaba a mi misma, mis propios pensamientos y creencias... pero cada día me doy cuenta un poco más de que no tengo nada claro ni se lo que quiero.

En todo el tiempo que llevo en este juego que algunos llaman vida he aprendido que esta misma dura un momento, un breve instante, que nada es para siempre ni un único pensamiento. Vivimos pensando en el mañana, intentando comprender el ayer y mientras tanto dejamos escapar el día de hoy, y es que no nos damos cuenta de que lo importante es el presente, que lo pasado ya pasado está, y que lo que va a venir ya vendrá, que todo cambia de la noche a la mañana y no se si es porque en la vida hay que vivir el momento o porque cada día es realmente más distinto al anterior. Si me marco objetivos tengo miedo a no cumplirlos y si no me marco ninguna meta nunca sentiría de la misma forma que una persona que sí se los marca, pero cada día que va pasando tengo menos claro que el objetivo que me había impuesto sea el que me hará realmente feliz, no se si es porque soy así, si es porque soy idiota o simplemente porque estoy perdida y lo que me pueda pasar me es indiferente... Sinceramente, no lo sé.


Así es como siento mi vida en este instante, como apostar a ciegas, ya no se si lo que he querido hasta ahora es lo que realmente me hará feliz, ni siquiera si lograré conseguirlo, si lo que ahora me hace feliz y con lo que estoy cómoda me hará crecer como persona, pero supongo que en esto consiste la vida, en arriesgarse a todo y ver el resultado solamente al final.

Set me free

La historia de mi vida ha sido buscar lo adecuado y no lo he encontrado. Hay dolor en mi alma, porque parezco estar tan equivocada... no quiero seguir haciendo esto, no quiero ser el motivo por el que siempre termino huyendo. Lo siento en el aire como si acariciara mi pelo. Su verdad podría poner un arma en mi cabeza y seguir con mi vida, porque con tres palabras logra que derrumbe el muro que me había construido para tenerle alejado de mi mente y mi corazón, para destruir todo lo que pensaba sobre lo que teníamos. Para destruirme a mi misma

Hoy por hoy

Quiero hacer cosas que no debo, reírme de ti y de tus chistes malos, quiero que me toques el pelo y me llames "pequeña". Quiero despertarme con un "buenos días princesa" , mirarte a los ojos y perderme en ese hielo azul tan cálido. Quiero morderte los labios y jugar con tu oreja y tu pelo mientras estoy sentada a tu lado. No quiero sólo tus buenos días, sino tus mejores noches.

Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mi como una luna en el agua.