domingo, 12 de febrero de 2012

Presente

Recuerdo cuando era pequeña que me preguntaron alguna vez si era una niña perfecta y yo no supe que decir. Esta noche me doy cuenta de que he crecido lo suficiente para responder a esa pregunta. 
En toda mi vida he sido muchas cosas, he sido una niña adorable y buena, una traviesa, una llorona, una caprichosa, un chicarrón, un monstruo destructor, una sensible y romántica, una pasota, una sociópata, una melancólica, una borde, un cielo y un diablo, un remanso de paz y una tormenta caotica, incluso un agujero negro. También he sido inteligente, valiente y cobarde, una idiota, una irresponsable, imprudente, he sido consecuente y rebelde, muchas veces fui y soy tímida, otras tantas trato de ser una fiera, algunas llego a ser enternecedora. Siempre he sido terca, unas tantas implacable, un hueso duro de roer, un pez que se deja llevar por la corriente, alguien con ideas propias, una cenicienta sin zapatos de cristal, una soñadora, tonta, una chica sencilla en ocasiones y muchas veces complicada, atrevida, una lunática en demasiados momentos y una tardona que siempre se hace esperar, también inocente y alguna vez perspicaz. He llegado a ser alguien que no vivía en otro sitio que en las nubes y que actuaba sin pensar, otras veces he estado al filo del precipicio y con los pies bien anclados en el suelo, hasta mi vida a sido un vacío en el que no dejaba de caer, he sido también un libro abierto en el que la gente contaba su historia y se iba y también un cajón vacío, cerrado y hermético. He sido grande y muy muy pequeñita. He sido alguien que ha corrido con el viento en contra y también a favor.

En cada etapa de mi vida he demostrado ser una persona diferente. Algunos días peor y otros mejor. Me he metamorfoseado demasiadas veces algunas veces de mayor agrado que otras, de eso no cabe la menor duda pero nunca jamás he sido perfecta. Solo intenté ser dueña de mi propia vida en cada momento, buscaba lograr que nadie pudiese decirme como vivir, arriesgándome yo misma a cada paso que daba, buscándome con diferentes formas de ser y soñando que volaba muy muy alto, que nadie podía hacerme bajar. Mostrándome sin miedo. Sigo intentando lo mismo porque voy a luchar por lo que quiero hasta conseguirlo, lograré lo fácil, lo difícil y lo improbable, y hasta lo imposible, sin olvidar los buenos recuerdos, por mucho que me pueda doler recordarlos pero mirando hacia el pasado y viendo las cosas buenas como etapas en la vida que me hicieron feliz, demostrando al mundo que ya está bien de tanta tristeza y de inseguridad, que toca sonreír con lo poco que nos de la vida sin pararnos ni caernos, y si caemos que el daño cure rápido, sin preocupaciones, sumando y siguiendo siempre. Haciendo de mis errores parte de mis mejores historias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario